Gran Vignemale o Pique Longue, Pic du Clout de la Hount, Cerbillona, Pico Central y Montferrat

Os proponemos realizar la ascensión al emblemático Gran Vignemale desde el valle de Ossoue y haciendo noche en el refugio Bayssellance, una de las mejores rutas de alta montaña que se pueden hacer en los Pirineos. Además, completamos esta gran ascensión recorriendo toda la cresta que va desde el Gran Vignemale hasta el Montferrat, haciendo, así, una impresionante circular que sube hasta 5 tresmiles: el Gran Vignemale, el pico Clot de la Hount, el Cerbillona, el pico Central y el Montferrat.

El Gran Vignemale, también llamado Pique Longue o Comachibosa (en Aragón), es el pico más alto del gran conjunto de tresmiles que integran el macizo del Vignemale: 16 cumbres superan los 3.000m, 10 de principales -el pico de Milieu (3.130m), el Gran Tapou (3.150m), el Montferrat (3.219m), el pico Central (3.235m), el Cerbillona (3.247m), el pico Clot de la Hount (3.289m), el Gran Vignemale (3.298m), el Piton Carré (3.197m), la Punta Chausenque (3.204m) y el Petit Vignemale (3.032m)- y 6 de secundarios. Nos atreveríamos a decir que el Vignemale, junto con el Aneto, el Posets, el Monte Perdido y el Balaitús conforman la joya de la corona de la gran cordillera pirenaica. El macizo del Vignemale tiene una forma muy singular debido a que la mayoría de sus cimas forman un circo alrededor del glaciar de Ossoue. El Gran Vignemale es la montaña más elevada del eje axial del Pirineo (línea fronteriza hispano francesa) y se considera la montaña más alpina de todas: todos los itinerarios que conducen hasta su cima son muy espectaculares. Su imponente y atractiva cara norte, a la que se llega subiendo por el valle de Gaube, conforma una de las estampas más bellas y conocidas de los Pirineos. Es también en esta famosa cara norte del Vignemale donde se abrieron las primeras vías de alta dificultad del Pirineo en roca y hielo, para hacerse en condiciones invernales. Tres hermosos valles pirenaicos confluyen en la cima de la Pique Longue: el valle de Gaube, el valle de Ossoue y el valle de Bujaruelo. El macizo del Vignemale forma parte del Parque Nacional de los Pirineos y está integrado en la Reserva de la Biosfera Ordesa - Viñamala.

Track de la ruta

En algunos casos RUTES PIRINEUS ha manipulado los tracks para corregir problemas en la recepción de la señal GPS y su posterior grabación. En estos casos algunos tramos de la ruta del track son aproximados y han sido proyectados sobre el mapa.

Exchange Format (.gpx) Google Earth (.kmz)

Más información

Desde la población de Luz-Saint-Sauveur (Francia) subimos por la carretera D-921 hacia Gavarnie. En la entrada de esta localidad, tomamos la carretera de Les Espécières a la derecha. Después de unos 800m llegamos a una intersección en la que debemos girar a la derecha en dirección al valle de Ossoue (indicación de "Barrage d’Ossoue"). La carretera asfaltada continúa durante unos 4 km y luego se convierte en una pista de tierra de estado variable según la temporada o el año y con bastantes piedras en su parte final, a partir de la cabaña de Milhas. Después de unos 4 km por esta pista llegamos a la presa de Ossoue, donde aparcamos.

Las rutas pueden variar mucho en función de la época del año, de la nieve y de las condiciones meteorológicas. La señalización (marcas, paneles, balizas) que podemos encontrar a lo largo de la ruta también puede variar con el tiempo. RUTES PIRINEUS no se responsabiliza de cualquier mal uso de sus guías y recomienda que cada uno sea responsable y prudente en la montaña. Igualmente, os invitamos a documentaros con libros y guías especializadas para complementar la información descrita. Todos los tiempos son efectivos y toman un carácter orientativo, no se han tenido en cuenta las paradas por pequeñas que sean. Para cualquier sugerencia, RUTES PIRINEUS os invita a enviar un correo a info@rutespirineus.cat.

¿Qué más podemos visitar?

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  Puente de Napoléon y vía ferrata

  Napoléon III hizo construir este puente entre los años 1859 y 1863. El puente hace 63m de alto y 68 de largo, y se encuentra en las afueras de Luz-Saint-Sauveur, en la carretera que va hacia Gavarnie. Justo debajo del puente está la vía ferrata que lleva su mismo nombre. Se trata de una vía ferrata corta, de no más de 20 minutos, con varios pasos desplomados y aéreos.

  Coordenadas GPS: 42.8583076º -0.0053330º

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  Estación de Esquí de Gavarnie-Gèdre

  Situada en el corazón del Parque Nacional de los Pirineos (Francia), esta estación de esquí es una de las atracciones del valle junto con su gran patrimonio natural: circos, lagos, picos de 3.000m,... Hace unos años Gavarnie fue declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. Para acceder a la estación de esquí, desde Gavarnie es necesario hacer algunos kilómetros en dirección al puerto de Bujaruelo.

  Coordenadas GPS: 42.7296498º -0.0309749º

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  Notre Dame des Neiges

  Situada a una altitud de 1.519m, en lo alto de una colina por encima de Gavarnie, esta estatua de Firmin Michelet data del año 1927. Llegamos a la estatua por un pequeño sendero que sale desde cerca del refugio de Granges de Holle (CAF - 1.495m), donde llegamos por la carretera que sube desde Gavarnie hacia la estación de esquí de Gavarnie-Gèdre.

  Coordenadas GPS: 42.7395633º -0.0173922º

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  Vía Ferrata de Coumély

  Se trata de una vía ferrata equipada donde los grandes alicientes son una larga pasarela y un zona desplomada. Para acceder al inicio de la vía ferrata, desde Gèdre continuamos en dirección a Gavarnie y al cabo de 3 km (poco después de la zona conocida como Chaos de Coumély) encontramos, a mano derecha de la carretera, un pequeño aparcamiento con un panel de madera indicando el inicio de la vía ferrata, cerca del puente de Couret.

  Coordenadas GPS: 42.7623º 0.0026º

Recorrido 1er día

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Empezamos la ruta en el bonito embalse de Ossoue (0:00h - 1.834m) desde donde ya podemos admirar, en dirección NO, algunas cimas: el Petit Vignemale, el Pitón Carré, la Punta Chausenque, el Gran Vignemale, el Montferrat,... También podemos reconocer la gran lengua de nieve que forma el glaciar de Ossoue. Justo al lado de la presa de Ossoue, en una modesta colina, encontramos la cabaña de Ossoue, un pequeño refugio abierto y en buen estado que nos podría servir de cobijo en caso de mal tiempo. Unos paneles informativos situados junto a la cabaña nos ofrecen datos y algunas informaciones de la zona. En este punto también empieza el camino que va hasta la cabaña de Lourdes y sube al pico de Milieu (3.130m) y al Grand Tapou (3.150m). 

Llegando a la presa de Ossoue por la pista de tierra.

El glaciar de Ossoue y los diferentes picos del macizo del Vignemale nos dan la bienvenida.

Paneles informativos junto a la cabaña de Ossoue.

Cabaña de Ossoue, a unos 1.835m de altitud.

El embalse y la presa de Ossoue.

Desde la presa, bordeamos el embalse dejándolo a nuestra izquierda. Avanzamos remontando el llano de Oulettes d'Ossoue, que se extiende hasta más allá del lago. El camino que tomamos coincide en este tramo con el GR-10, que encontramos indicado. La gran cantidad de gente que pasa, sobre todo durante los meses de verano, han hecho que el camino esté muy marcado y sea bastante ancho. 

Embalse de Ossoue.

Dejamos el lago de Ossoue atrás. Progresamos por un terreno muy cómodo.

En el extremo O del llano, cruzamos el arroyo a través de un pequeño puente (0:20h - 1.879m) y pasamos al otro margen del río. 

Cruzamos un puente.

El camino empieza a subir por el estrecho barranco de Ossoue, por donde el agua salta formando una hermosa cascada (0:35h - 1.952m). 

Cascada del barranco de Ossoue.

Pasamos muy cerca de la cascada.

Mirada atrás: llano de Oulettes d'Ossoue y embalse de Ossoue.

Una vez superado el tramo estrecho de la cascada, el camino continúa subiendo por la falda de la montaña en dirección NO. Pronto, sin embargo, el camino cambia de orientación y gira hacia el N, evitando las grandes paredes de roca que bajan del Montferrat y entrando de lleno en la mitad superior del barranco de Ossoue. 

La nieve está muy presente hasta bien entrada la temporada de verano. ¡Ojo, hay que vigilar con los puentes de nieve!

El camino es evidente.

Tras superar un tramo donde el camino ya toma una clara dirección N, bajamos unos metros y llegamos a una zona de tartera. Cruzamos diferentes arroyos, todos ellos provenientes de la hermosa cascada que tenemos a nuestra izquierda (O). 

El camino continúa haciendo unos zigzags. Lo podemos ver justo delante nuestro.

Cascada que hay antes de las Grottes de Bellevue.

Continuamos subiendo por el barranco de Ossoue siguiendo el sendero. Cuando llegamos a una altitud de aproximadamente 2.300m, el camino hace un gran rodeo hacia el O. 

El camino delante nuestro.

Mirada atrás: la zona de la cascada.

De repente se nos abre un magnífico panorama delante: disfrutamos de unas impresionantes vistas frontales de la parte baja del glaciar de Ossoue, del Petit Vignemale, el Montferrat y la Punta Chausenque,... 

Vista de la lengua de nieve del glaciar de Ossoue.

Llegamos a las célebres Grottes de Bellevue (2:00h - 2.430m), tres cuevas excavadas en una gran roca justo al lado del camino. Estas fueron las primeras cuevas que el conde Russell hizo excavar en esta montaña. Vale la pena entrar y curiosear en su interior, se encuentran en buen estado e incluso una de ellas tiene una doble entrada. Estas cuevas pueden ser una buena opción para hacer noche en caso de no querer subir hasta el refugio Bayssellance. 

Las 3 cuevas de Bellevue que hizo excavar Henry Russell.

EL CONDE HENRY RUSSELL

En 1861 el conde Russell, un romántico aristócrata francés que vivía en Pau, subió al Gran Vignemale y quedó tan maravillado por esta montaña que unos años después, en 1887, la compró al estado francés, que le concedió su propiedad para un período de 99 años. Russell encomendó edificar una torre de 5m de altura en la cima de la Pique Longue porque, de esta manera, su montaña, que tenía 3.298m de altitud, sobrepasaría los 3.300m. Poco después una fuerte tormenta destruyó la torre. El conde se negó a volverla a edificar, opinando, filosóficamente, que "el orgullo de los hombres no podía conducir a más desastres" y que "era mucho mejor dejar la montaña como Dios la había formado". Henry Russell también hizo excavar un total de siete cuevas repartidas en tres zonas diferentes de la montaña: las tres Grottes de Bellevue, junto al camino de subida al refugio Bayssellance, las tres cuevas que hay cerca del collado de Cerbillona y la Grotte Paradís, situada pocos metros por debajo de la cumbre del Gran Vignemale. Russell también es el autor de la memorable obra literaria "Recuerdos de un montañero" (1878).

Dejamos las cuevas atrás y llegamos al desvío del refugio Bayssellance (2:02 h - 2.464m), un cartel de madera nos indica el camino: el sendero que sale a mano derecha nos llevará hasta el refugio en unos aproximadamente 30 min. 

Indicación hacia el refugio Bayssellance.

Tomamos este sendero (N-NE) y cambiamos completamente la dirección que llevábamos. Hacemos varios zigzags que nos permiten superar el fuerte desnivel que hay. Después de caminar unos 10 min, sobrepasamos el contrafuerte que baja del Petit Vignemale y se nos abre la perspectiva hacia la zona donde se encuentra el refugio de Bayssellance (NO), debajo mismo de la Hourquette d'Ossoue. Desde este punto también podemos distinguir ya el Gran Vignemale, al fondo. 

Subiendo hacia el refugio vemos, en dirección O, como sobresale el Vignemale.

Vemos el refugio en lo alto de una colina, al fondo a la derecha.

Finalmente alcanzamos nuestro objetivo del primer día: el refugio Bayssellance (2:30h - 2.650m) propiedad del CAF de Burdeos (teléfono: +33 (0) 5 62 92 40 25 y web: refuge.bayssellance.free.fr). Se trata de un refugio que está guardado en primavera y verano (recomendamos consultar fechas). Tiene una capacidad de 58 plazas guardadas durante este período y una capacidad de 30 plazas libres fuera de este periodo (otoño e invierno). Se trata del refugio más alto del Pirineo y de uno de los más antiguos. Otra vía para llegar hasta este refugio es desde Cauterets (Pont d’Espagne), recorriendo el frecuentado valle de Oulettes de Gaube y subiendo por la Hourquette d’Ossoue. Esta opción nos permitiría contemplar la cara norte del Vignemale, pero supondría invertir casi el doble de tiempo que haciendo la ruta por el valle de Ossoue. Fuera del refugio vemos distintos lugares donde podríamos hacer vivac (siempre y cuando se vivaquee a más de 30m del refugio y entre las 19h y las 9h). 

Refugio Bayssellance.

Recorrido 2o día

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Desde el refugio Bayssellance (0:00h - 2.650m) bajamos en dirección SE por el mismo camino que hemos hecho el día anterior de subida. Bordeamos la cresta que baja del Petit Vignemale y encontramos un camino que sale a mano derecha (en dirección SO) y que llega directamente hasta la base del glaciar. No recomendamos este camino, sobre todo si hacemos este tramo de recorrido temprano (de noche o con poca luz): este sendero avanza por la base de la arista del Petit Vignemale, por una ladera inclinada, llena de piedras y muy resbaladiza. Nosotros no tomamos este camino y seguimos bajando hasta que enlazamos con el camino que sube desde el valle de Ossoue (0:20h - 2.464m). En este punto, encontramos fácilmente el camino que debemos tomar y que avanza por una tartera que ha dejado al descubierto el retroceso de la masa de hielo. Este camino nos lleva hasta el inicio del glaciar de Ossoue (1:00h - 2.700m), a unos 2.700m de altitud (dependiendo de la temporada y de la cantidad de hielo y nieve que haya). 

Llegando a la base del glaciar.

A partir de este punto, la ascensión al Gran Vignemale se efectúa por el glaciar de Ossoue. Este glaciar es el segundo mayor de los Pirineos después del glaciar del Aneto. No obstante, es el único glaciar que mantiene intacta la fisonomía alpina, a pesar de la fuerte regresión que ha sufrido en los últimos años. El glaciar de Ossoue se desborda en una lengua glaciar hacia el E (valle de Ossoue) que le atribuye un carácter único en todo el Pirineo. Según la época en que realizamos la ruta y dependiendo de cómo haya nevado durante el invierno y la primavera, las condiciones del glaciar pueden ser muy distintas. Es por este motivo que no hay un itinerario fijo y único para superarlo, éste va variando a lo largo del año. Su travesía no es complicada pero exige ciertas precauciones y llevar el material adecuado: crampones, piolet y, siendo prudentes, material de encordada en glaciar.

Empezamos el ascenso por el glaciar pasando por debajo de algunos pequeños seracs y bloques de hielo que constituyen la parte frontal de la lengua terminal del glaciar. 

Empezando a subir por el glaciar.

Subimos en dirección SO buscando el contrafuerte oriental del Montferrat. 

Subimos en dirección SO, el Montferrat al fondo.

Progresando por el glaciar, que encontramos en muy buen estado.

Entramos en el lomo del glaciar y avanzamos esquivando algunas grietas. Hacemos una diagonal ascendente (NO), siguiendo la traza que pasa por debajo de la Punta Chausenque y del Piton Carré. A finales de verano, si el hielo está muy agrietado, es más prudente acceder a la parte superior del glaciar subiendo por la cresta del Montferrat. 

Avanzamos en dirección O-NO hacia la base del gran Vignemale.

Seguimos una traza bien vistosa.

Llegando a la salida del corredor de Gaube (Couloir de Gaube).

Las formas que hace la roca del Gran Vignemale son sorprendentes.

Tres personas dirigiéndose a las cuevas de Russell, debajo el collado de Cerbillona.

Llegamos prácticamente a la salida del corredor de Gaube (Couloir de Gaube en francés) y nos situamos a los pies del Gran Vignemale (2:15h - 3.151m). 

Pasamos por el lado de la salida del corredor de Gaube, junto al Piton Carré y la Punta Chausenque.

Vistas del glaciar de Ossoue y el Montferrat.

El tramo que nos queda hasta la cumbre consiste en una trepada por un terreno donde se combinan la roca sólida con una roca muy descompuesta. Como se trata de un itinerario muy frecuentado (sobre todo durante los meses de verano) hay muchas piedras sueltas que caen hacia el glaciar. Es del todo recomendable el uso del casco. 

Subiendo por el tramo de roca hasta la cumbre.

Hay que buscar en todo momento el itinerario más accesible y el que tenga la roca menos descompuesta. Vemos varios rastros de trazas que el paso de los excursionistas ha ido dejando. Algunos hitos nos pueden ayudar a encontrar el mejor itinerario. Poco antes de alcanzar la cima, nos encontramos con la Grotte Paradis (2:25h - 3.259m), otra de las cuevas que Henry Russell hizo construir. Justo encima de la cueva hay una placa conmemorativa del Club Alpin Français en memoria del conde Russell. 

Grotte Paradís, situada unos 40m por debajo de la cumbre del Gran Vignemale.

Interior de la Grotte Paradís.

Continuamos subiendo un poco más y finalmente llegamos a la cima del Gran Vignemale (2:45h - 3.298m), donde encontramos un vértice geodésico y unas banderolas de colores típicas del Himalaya. 

Cima del Gran Vignemale o Pique Longue (3.298m).

Desde la cumbre divisamos un panorama grandioso. Podemos ver la mayoría de las cumbres del Pirineo Central, unas montañas llenas de contrastes. Mientras que en la cara N imperan los abismos y los grandes precipicios, en la cara S la nieve envuelve suavemente los grandes picos. ¡Qué espectáculo! Entre otros, podemos distinguir: el Garmo Negro, el Algas, el Argualas, los Infiernos, el Balaitús, el Midi d'Ossau, el Monte Perdido, el Marboré, el Casco, el Taillón, los Gabietos,... 

Vistas hacia la zona de Panticosa: el Garmo Negro, el Algas, el Argualas, los Infiernos, la Marmolera,...

Vistas del Balaitús.

Vistas del Midi d'Ossau.

Vistas del Monte Perdido, el Marboré, el Casco, el Taillón, el Gabietos,... Y en primer término, el Montferrat.

A continuación, desde el Gran Vignemale, empezamos a avanzar por su cresta O en dirección al pico Clot de la Hount, el siguiente tresmil que queremos alcanzar. 

Cresta que hay entre el Gran Vignemale y el pico Clout de la Hount.

El itinerario avanza siempre por la vertiente S de la cresta, evitando, así, la vertiente N, mucho más agreste y vertical. Se trata de una cresta con algunos tramos muy descompuestos y deberemos ayudarnos con las manos en más de una ocasión para poder progresar con seguridad. En la cresta encontramos algunas zonas un poco aéreas y algunos pasos de II. En todo momento hay que elegir el itinerario más evidente y lógico, intentando seguir los rastros de camino que hay y algunos hitos dispersos pero bien situados en lugares estratégicos. En más de una ocasión hay que alejarse unos metros del hilo de la arista para esquivar algunos bloques de roca o gendarmes. 

Destrepando por la cresta (Vignemale al fondo).

Descendemos unos metros para esquivar un gendarme.

Destrepada que nos lleva a través de una brecha.

Accedemos a una brecha desde la que subimos nuevamente unos metros.

Cerca de la brecha, un hito nos marca el camino correcto.

Llegamos, finalmente, después de media hora de cresta, a la cumbre del Clot de la Hount (3:15h - 3.289m). Esta cumbre recibió el nombre de un antiguo capitán francés de los ejércitos de Napoleón que afirmaba haber subido a ella en 1822 con un guía. Aunque el capitán era un buen montañero se puso en duda su hazaña y se supone que únicamente el guía llegó hasta la cima. 

Vistas de toda la cresta que hemos hecho desde el Vignemale hasta el pico Clot de la Hount.

Sierra de Tendeñera.

Desde el Clot de la Hount, seguimos, en dirección S, la cresta afilada que llega hasta el collado de Cerbillona. La cresta es bastante estrecha y aérea pero no presenta dificultades reales. 

Vistas del pico Cerbillona, el Pico Central y el Montferrat.

Bajando hacia el collado de Cerbillona.

Llegamos al collado de Cerbillona (3:30h - 3.204m), donde hay varios vivacs construidos para poder pasar la noche. Desde este punto podemos observar la gran disimetría que caracteriza al macizo del Vignemale. Mientras que la vertiente norte, la del valle de Gaube, está formada por grandes paredes de roca de hasta 800m de altura, el resto de vertientes de la montaña nos ofrecen un aspecto mucho más "amable". Si desde el collado de Cerbillona miramos hacia el pico Clot de la Hount y hacia la Pique Longue, es difícil imaginar que justo en la otra vertiente se abre un precipicio de casi 1 km. 

Collado de Cerbillona con el pico de Cerbillona en primer término y el Pico Central al fondo.

Pico Clot de la Hount y Pique Longue desde el collado de Cerbillona.

Glaciar de Ossoue desde el collado de Cerbillona.

Vale la pena, desde este collado, descender unos metros hacia el glaciar y acercarnos a ver de cerca las Tres Grottes de Henry Russell (3:35h - 3.200m). El conde Russell las hizo construir en la pared muy cerca del hielo del glaciar (s. XIX). El retroceso glacial que se ha producido en los últimos años, las ha elevado considerablemente respecto al nivel del glaciar dificultándose así su acceso. 

Cuevas de Russell en el collado de Cerbillona.

Detalle de las hermosas formas que hace la roca.

Desde el puerto de Cerbillona, límite occidental del glaciar, continuamos la marcha tomando el camino que sale en dirección S hacia el pico de Cerbillona (3:50h - 3.247m). Llegamos a la cumbre avanzando durante unos 15 minutos por una ancha arista que no presenta ninguna dificultad. 

Pico de Cerbillona con unas vistas impresionantes hacia el pico Clot de la Hount y el Gran Vignemale.

Continuamos por la cresta, que ahora toma una dirección E-SE. Nos dirigimos fácilmente hacia el siguiente tresmil: el pico Central. 

Bajando del pico Cerbillona hacia el collado de Lady Lister.

Antes, pasamos por el collado de Lady Lister (3:55h - 3.200m) desde donde disfrutamos de unas buenas vistas de todo el valle del río Ara, en la vertiente aragonesa del macizo del Vignemale. El escondido valle del Ara tiene una longitud de unos 13 km, convirtiéndose así en uno de los valles más largos del Pirineo. Fue por esta vertiente aragonesa por donde los guías franceses H.Cazaux y B.Guillembert conquistaron el Vignemale por primera vez en 1838. Al cabo de un tiempo, estos dos guías volvieron a hacer la misma ascensión, esta vez acompañados por una dama inglesa llamada Lady Lister y unos días después la volvieron a repetir acompañados del príncipe de la Moskowa, hijo del mariscal Ney de Napoléon. Es por ello que hoy se conoce la ruta que sube desde el valle del río Ara como la del corredor de la Moskowa y el collado donde se llega como el collado de Lady Lister. 

Vistas del largo valle del Ara.

Continuamos la ruta. Desde este collado enfilamos un caótico pedregal en dirección hacia nuestro próximo objetivo: el pico Central. 

Subiendo por un montón de piedras hacia el pico Central.

Pronto llegamos al pico Central (4:00h - 3.235m), que nuevamente nos ofrece unas vistas espectaculares del pico Clot de la Hount y la Pique Longue. Sorprende la claridad con la que podemos distinguir las cuatro cuevas de Russell excavadas en la pared (las 3 Grottes de Henry Russell y la Grotte Paradis). 

Vistas del pico Clot de la Hount y de la Pique Longue.

Bajamos del Pico Central y nos dirigimos en dirección E, hacia la cresta que une esta cima con el Montferrat: último tresmil de la jornada. 

Bajamos unos metros antes de crestear por encima de la Marmolera.

Se trata de un tramo de cresta con una roca excelente, muy aérea y con algunos pasos aislados de II pero sin grandes dificultades. El recorrido avanza en todo momento por la ladera N de la cresta; la vertiente S es mucho más vertical y expuesta. Es en esta vertiente S donde está el espectacular tobogán de roca caliza blanquecina llamado La Marmolera, que se precipita cientos de metros abajo hacia el valle del río Ara. 

Recorriendo la cresta encontramos algunos bloques que hay que superar trepando.

Cada vez tenemos la cima del Montferrat más cerca.

Tras superar el tramo más estrecho y aéreo de la cresta, esta se ensancha a medida que nos acercamos al Montferrat. 

Llegamos a un punto donde la cresta se ensancha y, por tanto, disminuye su dificultad.

Ya nos falta poco para alcanzar la cima, sólo alguna trepada más. 

Última trepada antes de alcanzar la cima del Montferrat.

La Marmolera, un impresionante tobogán de roca caliza.

Finalmente llegamos a la cima del Montferrat (4:45h - 3.219m). Esta cima está formada por dos cotas, la segunda más alta que la primera. Acabamos aquí todo el recorrido realizado por cresta desde el Gran Vignemale. Es un buen momento para disfrutar de las vistas del Barrage d’Ossoue, del pico del Grand Tapou y de Milieu, del refugio Baysellance,... 

Vistas del Barrage d’Ossoue.

Vistas hacia las cumbres del Grand Tapou y de Milieu.

Progresando entre las dos cotas que forman el Montferrat.

Desde la cumbre del Montferrat, emprendemos el camino de vuelta deshaciendo unos metros el camino realizado por la cresta y yendo a buscar el camino que baja por un pedregal (en dirección NE) directamente hacia el glaciar. 

Bajando del Montferrat.

Entramos nuevamente en el glaciar y enlazamos con la traza que hemos seguido antes en la subida. A partir de aquí, el recorrido ya es conocido, coincide con el camino que hemos hecho en la ida. 

Bajamos hacia el glaciar para enlazar con el camino que hemos hecho de subida.

Última mirada al gran patriarca: el Vignemale.

Descendiendo por la parte baja del glaciar.

Un rebeco, en la base del glaciar.

Sólo nos falta bajar hasta la base del glaciar, donde cogemos otra vez el camino que nos lleva hasta las cuevas de Bellevue, baja por el barranco de Ossoue y llega finalmente al Barrage d'Ossoue (7:45h - 1.834m) donde el día anterior hemos iniciado esta espectacular ruta, imprescindible para todo pirineista amante de la alta montaña.